El boxeador español Kiko Martínez revalidó hoy su título de campeón de Europa del peso supergallo al derrotar al francés de origen armenio Arsen Martirosyan en el Palacio de los Deportes de Lyon, en el sureste de Francia.
Martínez se impuso en el duodécimo asalto al detener el combate el árbitro después de que el púgil francés cayera por dos veces a la lona noqueado y se levantara aturdido.
En la segunda caída, tras recibir un fuerte croché de izquierda, Martirosyan se incorporó tras contar el árbitro hasta ocho pero ya no podía ni levantar los brazos para defenderse.
«El árbitro debería haber parado el combate antes», señaló el entrenador del púgil español, Alberto González, pero tras caer a la lona por primera vez «decidió darle un voto de confianza aunque se veía que no podía seguir», agregó.
Ante las 5.000 personas que abarrotaron el pabellón, el alicantino fue «de menos a más, primero dándole duro abajo para quitarle el aire, para finalizar los últimos asaltos pegándole sólo arriba», explicó el técnico.
Es la segunda vez que Kiko Martínez tumba al Martirosyan. En septiembre del 2010, el alicantino se impuso a los puntos en el Estadio Nacional de Dublín tras castigar duramente al francés, que acabó con una triple fractura de la mandíbula.
«Le pegamos duro, más duro incluso que la primera vez», declaró el entrenador del español por lo que «sabíamos que la victoria iba a ser cuestión de tiempo y que antes o después de desplomaría, pero el chaval es muy bravo y aguantó muchísimo», añadió.
Con esta victoria Kiko Martínez se coloca automáticamente como número cinco del mundo, lo cual le permite acercarse a la disputa del mundial.
El entrenador del boxeador español afirmó que el objetivo ahora es organizar una defensa voluntaria del título dentro de dos meses para tratar de entrar en la lucha por el cetro mundial en verano.
